Alfonso Martínez descuidó obras y finanzas municipales por andar en campaña
Hay evidentes retrasos en la construcción de la Ciudad Administrativa, luego que la administración de Alfonso Martínez Alcázar sumiera el proyecto en una espiral de demoras y desgaste financiero al centrar toda su atención en su campaña de reelección.
El propio alcalde, en un acto de sinceridad espontánea, ha reconocido que su enfoque en la campaña de reelección dejó a la deriva las necesarias supervisiones de esta y otras obras. El resultado: una ejecución desganada por parte de la empresa contratista, desprovista de la debida supervisión que permitiera mantener los estándares de calidad y los plazos establecidos.
El lamento del alcalde ante la prensa es una prueba fehaciente de la negligencia que ha permeado en la gestión municipal: “Pensé que estaría listo para el corte del listón, pero veo que aún falta mucho”, admitió Martínez Alcázar, revelando la magnitud del problema y su impacto en el erario público.
Cada día de retraso no solo dilapida recursos económicos, sino que también compromete la eficiencia administrativa que esta infraestructura prometía ofrecer.
Morelia merece un liderazgo comprometido con la transparencia, la eficacia y el buen manejo de los recursos públicos. El retraso en la construcción de la Ciudad Administrativa es un amargo recordatorio de la importancia de una gestión responsable y diligente, alejada de las distracciones políticas y enfocada en el bienestar de la ciudadanía.
