Celebra Alexis Velázquez aprobación de reforma indígena en Michoacán
Michoacán ha dado un paso monumental hacia la justicia histórica que los pueblos indígenas merecían. No podíamos cerrar el año sin saldar la deuda pendiente con los pueblos originarios, aseguró Pedro Alexis Velázquez Guzmán, coordinador de alcaldes de Morena en la entidad, al celebrar la histórica aprobación de la reforma indígena que reconoce la autonomía de las comunidades originarias. Una reforma que no solo es simbólica, sino que concreta una visión profunda de respeto y de enaltecimiento de nuestras raíces.
El Congreso del Estado de Michoacán ha dado el fallo a favor de la iniciativa que fue presentada por el gobernador, Alfredo Ramírez Bedolla, quien con un enfoque incluyente, escuchó todas las voces y promovió las demandas de las propias comunidades indígenas, logrando que el documento se elevara a rango constitucional. Es un hecho sin precedentes que coloca a Michoacán como un referente de justicia social, poniendo en el centro la autodeterminación de los pueblos originarios.
En palabras de Velázquez Guzmán, el gobernador Alfredo Ramírez Bedolla no es un impulsor de los derechos indígenas “de ahora”, sino un defensor histórico, un líder que ha trabajado con convicción y compromiso por garantizar la autonomía y el respeto pleno a los pueblos originarios de la entidad. A través de esta reforma, se avanza en el reconocimiento de los derechos inalienables de los pueblos indígenas, dejando claro que su futuro está en sus manos.
Este paso trascendental implica no solo un cambio legal, sino también un cambio cultural y estructural. Los municipios gobernados por Morena serán los encargados de asegurar que las comunidades indígenas que elijan el autogobierno puedan ejercerlo sin impedimentos, siempre en total respeto a esta nueva figura constitucional que está haciendo historia en Michoacán. El autogobierno será el canal por el cual las comunidades podrán decidir su destino y fortalecer sus estructuras internas, sin imposiciones externas.
Con esta reforma, los pueblos indígenas obtienen una serie de derechos irrevocables que son un parteaguas en la lucha por la igualdad. Se garantiza el acceso a presupuesto directo, el impulso a la participación activa de la mujer indígena en la vida pública, la traducción oficial de documentos al purépecha, y la promoción de las tradiciones y culturas dentro del sistema educativo, entre otros. Estos avances no solo son un reconocimiento a la diversidad, sino una afirmación de que Michoacán, como muchos otros estados del país, está decidido a respetar y valorar a sus pueblos originarios, reconociendo que su identidad es un pilar fundamental de la nación.
Este es un triunfo de la voluntad popular, de la justicia social y de la visión progresista del gobernador Alfredo Ramírez Bedolla, quien no ha escatimado esfuerzos para escuchar y hacer realidad las peticiones de las comunidades que durante tanto tiempo fueron silenciadas. La reforma indígena en Michoacán no es solo una ley, es un mensaje claro de que la democracia real, la inclusión y el respeto por la diversidad son las bases sobre las cuales debemos construir un México más justo y más equitativo.