Fabiola Alanís urge a investigar a la Policía Morelia tras agresión a estudiantes normalistas
La madrugada de este domingo, un lamentable incidente en Morelia dejó al descubierto la preocupante relación entre la autoridad policial y los derechos humanos. La diputada Fabiola Alanís Sámano, coordinadora parlamentaria de Morena, exigió a la Fiscalía General de Michoacán una investigación exhaustiva sobre los elementos de la Policía Morelia que dispararon armas de fuego contra estudiantes, evidenciando así la falta de protocolos adecuados en situaciones de conflicto.
Alanís Sámano condenó enérgicamente que la corporación capitalina siga involucrándose en hechos que vulneran los derechos de los morelianos. “Toda corporación policial que atente contra la ciudadanía debe ser investigada. Los derechos humanos de las y los morelianos no pueden seguir siendo vulnerados por quienes, se supone, velan por su seguridad”, destacó en un comunicado.
La diputada enfatizó la urgencia de revisar los mecanismos de derechos humanos con los que opera la Policía Morelia, una necesidad que se vuelve crítica ante la recurrente violación de garantías individuales. Además, subrayó la importancia de transparentar los exámenes de control y confianza aplicados a los elementos de la policía, para determinar si están capacitados para cumplir con sus funciones sin poner en riesgo la integridad de los ciudadanos.
“No se trata solo de presumir que se cuenta con muchos policías; se trata de implementar una estrategia de seguridad que no vulnere los derechos humanos de las y los morelianos”, finalizó Alanís, dejando claro que el bienestar y la seguridad de la población deben estar por encima de cualquier interés institucional.
Este incidente resalta una realidad preocupante: la necesidad de un profundo cambio en la cultura operativa de las fuerzas de seguridad en Michoacán. La confianza ciudadana, cada vez más erosionada, exige un compromiso genuino por parte de las autoridades para garantizar que el uso de la fuerza se aplique únicamente en el marco de la ley y el respeto a los derechos humanos. La sociedad moreliana está en un punto de inflexión; la respuesta de las autoridades será determinante para restaurar la confianza y asegurar que tales violaciones no se repitan.