Familia de Silvano encuentra refugio en Morón
En un espectáculo de traiciones y conveniencias, la familia de Silvano Aureoles ha decidido saltar del barco del PRD para sumarse al proyecto político de Raúl Morón Orozco rumbo al Senado de la República.
Raúl Morón, quien no ha escatimado en alardear su cercanía con Silvano Aureoles, ve hoy en esta alianza oportunista un nuevo capítulo en su búsqueda del poder. La exclusión del hermano de Aureoles del proceso de selección de candidatos del PRD ha sido el pretexto perfecto para que la familia del exgobernador dé la espalda a su antiguo partido y se sume al bando de quien parece prometerles un lugar más cómodo en el tablero político.
Es interesante observar cómo esta alianza se produce en medio de los conflictos internos de Morena, donde el equipo político de Morón ha lanzado dardos contra la direigencia nacional encabezada por Mario Delgado y Citlali Hernández. Pero hoy, ante la oportunidad de obtener más aliados, Morón encuentra refugio en los brazos de los silvanistas.
Este movimiento es un claro ejemplo de su capacidad de dejar de lado cualquier principio o compromiso en aras de asegurar su superviviencia y ascenso en el escenario político. La familia de Aureoles, en su búsqueda desesperada por mantenerse en el juego del poder, ha optado por aliarse con quien mejor le ofrece garantías, sin importar los compromisos previos o las consecuencias éticas.
Así, en un juego donde la moralidad y la ética son sacrificadas en el altar de la ambición y el oportunismo, la alianza entre la familia de Silvano Aureoles y Raúl Morón Orozco es solo un capítulo más en la crónica de la vieja política mexicana, donde los intereses personales y el cálculo político siempre están por encima del bienestar y los principios de la ciudadanía
