Hasta Trump considera que prohibición del aborto en Arizona va demasiado lejos
En medio de la agitación política en Estados Unidos, el expresidente Donald Trump ha vuelto a poner sobre la mesa el polémico tema del aborto, esta vez con críticas dirigidas hacia el estado de Arizona por lo que considera una prohibición excesiva, basada en una ley del siglo XIX.
Trump, quien se encontraba en la ciudad de Atlanta, Georgia, para un evento público, respondió a preguntas de periodistas sobre la controvertida ley antiaborto de Arizona. El exmandatario expresó su acuerdo con la visión de que la medida fue demasiado lejos: “Sí, lo hicieron, y eso se arreglará”, afirmó, sugiriendo que confía en una rectificación por parte del gobernador y la Corte de Arizona.
La reciente decisión de la Corte Suprema de Arizona de reinstaurar una ley del siglo XIX que prohíbe en gran medida el aborto ha generado un intenso debate en un país ya dividido, especialmente en el contexto de las elecciones presidenciales que se avecinan en noviembre.
Las declaraciones de Trump llegan apenas dos días después de haber confundido a algunos sectores conservadores al publicar un mensaje en redes sociales sobre el tema, en el cual omitió mencionar la prohibición nacional del aborto. Esta ambigüedad no es nueva en Trump, quien ha oscilado entre posturas contradictorias en relación al aborto, frustrando a algunos de sus principales partidarios que abogan firmemente por la prohibición, mientras intenta evitar compromisos claros que puedan alienar a los votantes.
En un video difundido el pasado lunes, Trump reiteró su posición de que el tema del aborto debería ser decidido por los estados, añadiendo un matiz a su histórica postura antiaborto. Sin embargo, su última crítica a la prohibición de Arizona indica una fisura en su coherencia en este asunto.
El papel de Trump en la política estadounidense sigue siendo relevante, incluso fuera del cargo presidencial, y sus palabras continúan generando debate y controversia en un país donde el aborto es uno de los temas más polarizantes. Su último comentario sobre la situación en Arizona promete alimentar aún más la discusión en un contexto electoral cada vez más tenso.
