Michoacán prepara un presupuesto austero y socialmente responsable para 2025: Fabiola Alanís
El próximo presupuesto estatal de Michoacán llevará una marca clara de la 4T, según lo anticipado por Fabiola Alanís Sámano, coordinadora del Grupo Parlamentario de Morena en el Congreso del Estado. La legisladora enfatizó que el plan fiscal para 2025 será austero, transparente y priorizará los programas sociales, con un enfoque particular en la perspectiva de género y el bienestar social.
Alanís Sámano, quien también preside la Junta de Coordinación Política de la 76 Legislatura, sostuvo un encuentro clave con las autoridades encargadas de las finanzas estatales, entre ellas, el secretario de Finanzas y Administración, Luis Navarro. En dicha reunión, quedó trazada la ruta hacia la elaboración de un presupuesto que se espera rebase los 96 mil millones de pesos, manteniendo como ejes rectores los principios de austeridad y transparencia que han caracterizado a la administración federal bajo el liderazgo de la 4T.
“La prioridad será garantizar un gasto que atienda las necesidades sociales, especialmente los programas con enfoque de género y aquellos que contribuyan al bienestar de la población más vulnerable”, señaló Alanís, subrayando la importancia de que el presupuesto refleje un compromiso con las políticas públicas inclusivas. Para la diputada, especialista en políticas públicas con perspectiva de género, esta visión debe ser el hilo conductor que defina el próximo ejercicio fiscal.
En un contexto de reestructuración financiera, donde las finanzas públicas se han ido saneando paulatinamente, la propuesta presupuestal de 2025 marcará una nueva etapa para Michoacán. Alanís reconoció los avances en la administración de los recursos del estado, calificando el modelo financiero como “efectivo” y confiando en que la planeación actual permitirá que los recursos sean distribuidos con justicia y equidad.
Las expectativas están puestas en recibir, en tiempo y forma, la propuesta federal que servirá como base para la construcción del presupuesto local. A partir de ahí, el Ejecutivo Estatal presentará su versión definitiva ante el Congreso, que deberá analizar y aprobar un plan económico que impulse las prioridades sociales y responda a las necesidades más urgentes de la entidad.
