Morelia enfrenta un futuro sediento bajo la gestión de Alfonso Martínez Alcázar
La administración municipal de Alfonso Martínez Alcázar ha sumido a más de 100 mil habitantes de Morelia en una crisis hídrica sin precedentes, incumpliendo las promesas que lo pusieron donde está.
A pesar de las afirmaciones realizadas en 2021 para poner en funcionamiento numerosos pozos, la realidad es desoladora: la cantidad de pozos inoperativos supera con creces a los habilitados para abastecer este recurso vital.
Los problemas de distribución y el agotamiento de las fuentes hídricas han llevado a que más del 15% de las fuentes de agua subterráneas en Morelia estén en condiciones críticas. Esto afecta a más de 80 colonias en la ciudad, donde la rotación del suministro de agua se prolonga cada vez más, agudizando la angustia de los residentes.
La situación se agrava con la previsión de que otros 20 pozos podrían colapsar en los próximos 5 años, debido a la explotación excesiva del acuífero subterráneo y la falta de recarga.
En paralelo, más del 60% del agua distribuida por el Organismo Operador de Agua Potable, Alcantarillado y Saneamiento (OOAPAS) se desperdicia en fugas, agravando aún más la escasez.
La inacción durante la gestión de Martínez Alcázar ha llevado a Morelia a una crisis hídrica inminente. Se requiere una intervención urgente y decisiva por parte de las autoridades para garantizar un acceso equitativo y sostenible al agua, antes de que la situación se deteriore aún más y ponga en peligro la calidad de vida de los ciudadanos.