Repuntan robos a negocios de Morelia durante administración de Alfonso Martínez
En el primer bimestre del presente año, los negocios de la capita michoacana experimentaron un preocupante incremente en los casos de robo, revelando un panorama desfiante para la seguridad y el desarrollo económico de la región.
La falta de coordinación y estrategia por parte del gobierno municipal encabezado por Alfonso Martínez Alcázar ha sido señalada como un factor determinante en ese preocupante repunte delictivo. Según datos proporcionados por el Secretariado Ejecutivo del Sistema Estatal de Seguridad Pública de Michoacán, se registró un alarmante aumento del 69% en los casos de robo a negocios durante el primer bimnestre del año en curso.
Los números preocupan: en enero se reportaron 22 casos de atracos a establecimientos, cifra que se mantuvo inalterada en febrero con otros 20 incidentes denunciados. Comparativamente, en el mismo periodo del año anterior, los registros arrojaron una menor incidencia delictiva, con 13 casos en enero y 14 en febrero, según datos de la misma fuente informativa.
Sin embargo, estos números podrían ser solo la punta del iceberg. Especialistas en seguridad advierten sobre la existencia de una cifra negra de casos no denunciados, especialmente en delitos como robo a negocios, a casa habitación y a transeúntes. Esta realidad sugiere que los indicadores de incidencia delictiva podrían multiplicarse por tres o incluso por cinco para aproximarse a una cifra más cercana a la realidad.
Ante este escenario, la preocupación entre los comerciantes y la ciudadanía en general va en aumento. La inseguridad no solo afecta la integridad patrimonial de los negocios, sino que también mina la confianza y el desarrollo económico de la región, generando un entorno desfavorable para la inversión y el crecimiento empresarial.
En este contexto, se vuelve imperativo que las autoridades locales tomen medidas urgentes y efectivas para combatir la inseguridad, promoviendo una mayor coordinación entre las distintas instancias gubernamentales y reforzando las estrategias de prevención y combate al delito. De lo contrario, el panorama para los negocios de Morelia seguirá siendo sombrío y lleno de incertidumbre.